Antes, ratificaron su solidaridad con los alumnos expulsados de la UNAM, cuya reinstalación exigen.
Alrededor de las 15:15 horas, los jóvenes encapuchados liberaron la rectoría de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). De un total de 10, sólo quedaban cinco, quienes se hicieron llamar Demetrio, Poncho y Atenea, entre otros.
En un manifiesto ratificaron su solidaridad con los alumnos expulsados de la UNAM, cuya reinstalación exigen, y demandaron también que se ponga fin a la “criminalización y represión de los integrantes que se encuentran en la lucha social”.
Pidieron una respuesta inmediata al pliego petitorio de los estudiantes del CCH Naucalpan. Asimismo, manifestaron que en ningún momento el rector de la UAM Iztapalapa se acercó quienes tomaron las instalaciones para iniciar un diálogo. “Por lo tanto, es falso que nos hayamos negado a dialogar”, dijeron.
Los jóvenes encapuchados advirtieron que la entrega de rectoría no significa el final de su lucha, “por el contrario, es el principio de una serie de acciones que continuarán”.
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