La ciudadanía española indignada por el escándalo de corrupción protagonizado por la cúpula del Partido Popular no deja de manifestar su rechazo en la calle. Los manifestantes exigen la dimisión del Ejecutivo.
Bajo el lema 'Nulidad es impunidad' las organizaciones de la acusación popular en el caso de los llamados papéles Bárcenas organizaron movilizaciones multitudinarias en la Puerta del Sol de Madrid. Con esta acción miles de españoles exigen explicaciones claras por el escándalo de corrupción en la élite política y la dimisión de Rajoy.
"No se puede estar gobernando sobre una mentira. Este Gobierno no tiene nada más que un camino y es disolver el Parlamento y dar la palabra al pueblo para que el pueblo decida qué es lo que quiere de nuestro futuro", dijo el coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara.
Los últimos tres secretarios generales del PP citados como testigos tendrán que declarar los próximos 13 y 14 de agosto. La última en hacerlo será la actual secretaria general, María Dolores de Cospedal.
El llamado 'caso Bárcenas' estalló tras la publicación en la prensa de una supuesta contabilidad paralela en la cúpula del partido gobernante, el Partido Popular, según la cual sus miembros recibían grandes cantidades de dinero de donaciones de empresas que cobraban en forma de sobresueldos. Tanto Cospedal como Rajoy negaron rotundamente haber cobrado sobresueldos y tampoco reconocen la existencia de una contabilidad B en el partido, una negativa que según algunos analistas denota incapacidad política y que se refleja en las calles españolas.
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